A veces creemos que planeando un futuro idílico lejano podremos llevar nuestros objetivos hacia la cima pero siempre la realidad nos ataca inclemente con eventualidades imprevistas, tirando al suelo todas nuestras aspiraciones y dejándonos como empezamos, volviendo a replanear todo desde 0. No queremos que nuestros planes se frustren, para evitar estos dolores de cabeza lo ideal es implementar Lean, una metodología que te ayuda a pensar en lo estrictamente necesario y planeando metas a corto plazo que se complementan con el tiempo creando una cadena de flujos efectiva y maleable para que no vuelvas a empezar todo desde la nada.
Lo que plantea esta metología es un conjunto de mejores prácticas para la gestión de los procesos empresariales haciéndolas más efectivas y mejorando el flujo empresarial. Este enfoque está en actuar sobre lo que más genere valor en el negocio y liberar las cargas de trabajo en actividades triviales y de poco impacto que solo limitan el potencial de los equipos.
De donde sale esta metodología?
Nace de la filosofía de Toyota y lo que busca es encontrar la mayor satisfacción del cliente con el menor consumo de recursos o esfuerzos posible, evitando cualquier procesos o actividad que no aporta ningún tipo de valor positivo, algo similar a hacerle debugging (sanear) al esquema de administración.
Entre estos desperdicios que debemos evitar o suprimir encontramos los siguientes:
Movilidad: No odian las reuniones innecesarias que se pueden solucionar con 1 correo bien escrito? pues de eso se trata esta falencia, cuando no se optimizan los tiempos y se recurre a la movilización inocua. Trata de evitar estos percanses y verás cómo se optimiza el tiempo.
Sobreproducción: Perder el tiempo en tareas que no llevan a ningún sitio no es efectivo o hacer mucho pero que no tenga valor en el flujo, es letal para la eficiencia. Se aconseja no tener excesos de producción ya que el mercado es muy volátil y los procesos pueden cambiar en cualquier momento y un descontrol de la producción puede generar grandes gastos innecesarios. Es necesario enfocar los recursos y la fuerza de trabajo en los procesos actuales para entregarlos con la mejor calidad y precio.
Tiempo en espera: La única espera que disfrutamos es la navidad, evita tener un flujo congelado y optimiza las tareas pendientes con objetivos claros y fechas de entrega medibles para mejorar el el flujo de actividades, el tiempo es oro!
Inventario: Esta metología propone tener el inventario de vital necesidad en bodega ya que ocupa espacio valioso del que podemos disponer en caso de algún cambio o actualización de las necesidades. algunas materias primas o productos pueden quedar obsoletas cuando menos esperes ¡que no te tomen por sorpresa!
"Trabaja con lo que tienes, cuando lo tienes que hacer, con la mejor calidad y el menor desperdicio. Enfócate hacia la satisfacción del cliente"
Tener lo esencial nos lleva a la eficiencia en los flujos:
Fabrica únicamente lo que se necesita y evitar sobreproducción y almacenaje excesivo e innecesario de Items o gestiones.
Elimina aquello que no añada valor al producto.
Detén la producción si algo va mal, no maquilles las falencias que a futuro sabes van a hacer un efecto bola de nieve y es casi imposible pararla.
Mantener los procesos en ciclos de mejora continua, pequeños pasos pueden llevarte muy lejos.
Lo que se busca es la agilidad en los procesos, trabajar en lo que genere más impacto y depurar o mitigar lo que nos haga desperdiciar tiempo valioso de productividad como tal enfocándonos en la demanda real del producto y evitando los planes estáticos a largo plazo tomando un modelo de establecimiento de objetivos, gestión de ellos, entrega y mejora constante de lo que se vaya presentando.
¡No se trata de entregar las cosas sin terminar o mal hechas! Es trabajar en lo que realmente tiene valor y no hay fuente más fiel para saber que da valor al presente que el presente mismo, si enlazas las necesidades inmediatas y haces una cadena, notarás que es mucho más eficiente que especular con un futuro que está sujeto a cambios abruptos.
Esta metología también hace hincapié en la cultura organizacional y en el recurso humano puesto que es este el que genera el mayor valor a la compañía, lo que nos lleva a estar a la escucha de todos los componentes de la empresa y crear un equipo total que apunte hacia la misma dirección.
Te compartimos algunos videos donde ahondamos un poco más sobre estos temas de metodologías ágiles y como se implementan efectivamente en un flujo empresarial.
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